Este símbolo representa dos lugares, uno significa dónde estamos y el otro hacia dónde vamos. Es importante analizar el estado del puente, y de los elementos que lo rodean, en nuestro sueño, así como nuestra actitud. Por ejemplo, un puente sobre un río con fuertes corrientes que no nos atrevemos a cruzar, puede interpretarse como el temor a ser arrastrado por las pasiones y los instintos más salvajes. En cualquier caso el sueño nos mostrará las dificultades o facilidades que encontraremos hasta alcanzar nuestro objetivo.